Si estás buscando un desayuno saludable, que te dé energía y que te mantenga saciado para toda la mañana, tenemos una buena noticia para ti: te presentamos el smoothie bowl. La idea es muy simple: frutas, verduras, cereales, grasas beneficiosas y proteínas en el mismo plato, con un aspecto inmejorable y además sabroso, ¿quién da más?
En una sociedad en la que todo se mueve muy deprisa y no tenemos tiempo para casi nada, el smoothie bowl actúa también como una reivindicación del movimiento de slow food: tómate tu tiempo para prepararlo, siéntate a la mesa y disfruta de tu desayuno (o merienda) de una forma calmada. ¿Qué ingredientes podemos incluir?
Lo bueno del smoothie bowl es que admite prácticamente cualquier ingrediente que quieras poner. En lugar de una base líquida como la que usan los smoothies, necesitaremos una base más cremosa: para conseguirla tan solo tenemos que colocar en la batidora los ingredientes que más nos gusten y, como último paso, vamos añadiendo el líquido (agua, leche, leche de avena, leche de coco, yogur) poco a poco hasta encontrar la textura adecuada.
¿Qué ingredientes incluimos en nuestro smoothie bowl?
Para la base del smoothie bowl
- Verduras y hortalizas: espinacas, kale (col rizada), zanahoria, pepino, calabacín, apio...
- Frutas: fresas, manzanas, peras, plátanos (al natural o congelados), arándanos (mejor congelados), frutas del bosque (mejor congeladas), sandía, melón, naranjas, limón, aguacate, kiwis...
- Líquido (poco, para dar textura cremosa): yogur natural o griego, leche, leche de avena, bebida soja, leche de coco, leche de almendras, zumo de frutas, agua...
- Para realizar un buen aporte de proteínas (la mayoría de los ingredientes son ricos en grasase hidratos de carbono), podemos completar nuestro smoothie bowl con un cacito de proteína en polvo con o sin sabor.
¿Qué usamos como toppings?
Los toppings se colocan por encima de nuestro smoothie bowl para darle sabor y también un aspecto más apetitoso. Podemos usar todo tipo de semillas (semillas de chía, semillas de lino, semillas de amapola), granola o avena (también podemos usarla en la base del smoothie para darle más consistencia), todo tipo de frutas (el coco rallado es uno de los preferidos), frutos secos (nueces, almendras, avellanas trituradas), fruta desecada (pasas, orejones).
Sí debemos tener cierto cuidado con los toppings porque es donde se nos suele ir la mano y podemos convertir un saludable smoothie bowl en un plato demasiado calórico y poco equilibrado.
Si buscáis inspiración os recomendamos que sigáis el instagram de Smoothie Bowl Recipes, donde encontraréis muchísimas recetas diferentes y riquísimas.
Imágenes | Smoothie Bowl Recipes
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