Los azúcares libres o añadidos, que no son los hidratos de fácil asimilación que elevan bruscamente la glucosa en sangre, deben evitarse al máximo en la dieta habitual. Es por eso que te mostramos los mejores recursos para endulzar nuestros platos sanamente sin acudir al azúcar, y sin excedernos con los edulcorantes.
Los azúcares que debes evitar en tus platos habituales
Cuando hablamos de azúcares es importante realizar una distinción entre azúcares intrínsecos o naturales que se ingieren como parte de alimentos nutritivos, de azúcares libres o añadidos que son los que se asimilan fácilmente y por ello, en exceso y con frecuencia resultan perjudiciales para el organismo.
Los azúcares naturales que podemos ingerir por ejemplo, con una hortaliza, una leche o bien, con frutas frescas y desecadas generalmente se acompañan de otros nutrientes que contribuyen a que su metabolización sea más lenta así como, que sacien de manera efectiva al organismo.
Por el contrario la miel, el azúcar de mesa, jarabes, siropes o bien, los azúcares libres que podemos encontrar en un zumo de frutas, se absorben en muy poco tiempo, elevando bruscamente la glucosa en el organismo, lo cual implica mayor predisposición a almacenar grasas así como también, un bajo poder saciante sin mayores nutrientes de calidad ni beneficios para nuestro cuerpo.
Por esta razón, es importante evitar los azúcares libres y añadidos en nuestros platos, ya sea de origen industrial o de origen natural como pueden ser los presentes en un zumo o en un batido, si queremos proteger la salud del organismo.
Las mejores recursos para endulzar tus platos sanamente
Sin acudir al agregado de azúcares o hidratos de fácil asimilación, podemos igualmente lograr platos dulces mucho más sanos y saciantes. Los recursos que pueden ayudar lograrlo son:
Hortalizas ricas en azúcares naturales
Las hortalizas como las zanahorias, remolachas, calabaza o boniato son fuente de azúcares en elevadas proporciones y pueden utilizarse en forma de puré o ralladas para diferentes platos.
Sumando fibra además de sabor dulce, podemos emplearlas para crear un carrot cake fitness, un brownie, un bizcocho, una tarta ligera, tortitas o galletas sin azúcares agregados.
Frutas frutas frescas maduras o cocidas diversas
Las frutas en todas sus variantes resultan una buena alternativa para endulzar nuestros platos. Algunos ejemplares como el plátano, la manzana, las cerezas o los higos son aun más concentrados en azúcares naturales y por ello, van perfectos para nuestros postres.
Las frutas frescas maduras en puré, ralladas o cocidas, pueden incorporarse a unas galletas, un helado, un brownie, unos muffins, unos bombones o unas tortitas y endulzar así como brindar fibra, vitaminas, minerales y contenido acuoso a nuestras preparaciones dulces.
Dátiles o frutas desecadas, concentradas en azúcares naturales
Los dátiles, así como los orejones, los higos secos u otras frutas desecadas con fuente concentrada de azúcares naturales pero también de fibra, proteínas vegetales, vitaminas y minerales.
Con estos ingredientes es posible crear desde unos bombones, unas barritas y unos biscotti, hasta una crema de chocolate, unas trufas o un brownie con sabor dulce sin acudir a opciones de mala calidad para el organismo.
Edulcorantes, para utilizar sin caer en excesos
Los edulcorantes, ya sean naturales como la estevia o artificiales y creados por la industria, sirven para reemplazar los azúcares libres o añadidos en platos varios, brindando sabor dulce sin mayor aporte calórico.
No obstante, es fundamental no utilizarlos en exceso y por el contrario acudir a alternativas naturales cuyo sabor dulce no es tan marcado y por lo tanto, contribuyen a reducir el umbral de dulzor en nuestro paladar.
Un exceso de edulcorante puede ser compensado con un ingreso mayor de calorías por parte de platos diversos o lo que es igual, con un mayor apetito. Por lo tanto, abusar de los mismos puede resultar perjudicial para la salud de forma semejante a un consumo habitual de azúcares.
Aconsejamos entonces, en lugar de azúcares libres y añadidos, emplear azúcares intrínsecos o alimentos con azúcares naturales en su interior para endulzar sanamente nuestras preparaciones.
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