Cuando de quemar calorías y ver resultados sobre nuestro estado físico se trata, todos sabemos que una combinación de entrenamiento anaeróbico con aeróbico es lo ideal para cuidar nuestra salud y ver logros notables, sin embargo la forma y distribución de los ejercicios puede ayudar aún más y acentuar los progresos.
En el caso del entrenamiento de fuerza, la intensidad, el descanso, la alimentación y la variedad son pilares fundamentales para ver sus efectos sobre el organismo. En los ejercicios aeróbicos estos factores también inciden, pero pasar largas horas sudando puede ser mucho menos efectivo que realizar un entrenamiento aeróbico fraccionado.
Por supuesto que el cuerpo requiere de su tiempo mínimo para comenzar a quemar grasas, pero podemos rendir mucho más y lograr una mayor intensidad si dividimos el entrenamiento en intervalos de 30 minutos cada una, por ejemplo.
Si tratamos de correr durante 60 minutos seguidos, lo más probable es que la intensidad disminuya progresivamente a medida que pasan los minutos, y así el cuerpo recibe una exigencia menor que genera menores beneficios cardiovasculares, que son los principales de la ejercitación aeróbica.
Por el contrario, si fraccionamos en dos sesiones de 30 minutos con un corto descanso entre medio de 5 minutos, lograremos semejar la intensidad y velocidad a la carrera inicial y por lo tanto, el cuerpo recibirá beneficios tal como si recién hubiéramos empezado a ejercitarnos.
Además, un tiempo tan corto de descanso no desactiva por completo al organismo, por ello, no interrumpe del todo el esfuerzo físico que estamos realizando y así, se puede incrementar el gasto de calorías.
Por otro lado, el entrenamiento fraccionado evita el agotamiento y contribuye a mantener la motivación, ya que no sólo sentiremos menos el cansancio sino que los logros serán más notables.
No olvidemos que cada persona es distinta y por ello, es imprescindible personalizar cada entrenamiento y progresar acorde al ritmo de cada individuo. Consultar con un entrenador siempre será aconsejable para prevenir pasos inadecuados en nuestra ejercitación.
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