Después de presentaros, en nuestra anterior entrada, las hazañas del skater en silla de ruedas Aaron Fotheringham hoy os traemos otra segunda gran historia de superación. Esta vez viene de la mano del italiano Alex Zanardi, un ex piloto de Fórmula1 al que le fueron amputadas ambas piernas a consecuencia de un accidente que sufrió en el circuito alemán de Lausitz en el año 2001.
Este infortunio en la vida de Alex no fue el final de nada, más bien todo lo contrario, fue el comienzo de un relato épico de superación. Y es que después del brutal accidente, el ex piloto italiano, ha llegado a ser medallista en los Juegos Paralímpicos de Londres del 2012 e incluso ha completado el Ironman más duro del mundo.
Su historia
Alex Zanardi (Bolonia, 1966) debutó con 25 años en Fórmula1, en el mismo equipo donde daba sus primeros pasos Michael Schumacher. Pasó por varias escuderías (Minardi y Lotus), sin embargo, su felicidad se tornó en disgusto en 2001, en el circuito alemán de Lausitz, donde sufrió un accidente que le dejó en coma durante varios días y consecuencia del cual los médicos tuvieron que amputarle las dos piernas.
Con el tiempo, se rehizo del accidente y del drama vivido, volviendo a competir en BMW gracias a unas prótesis de titanio adaptadas. En 2005 logró su primera victoria desde que "solo conducía con las manos" y casualidades de la vida, ésto fue a ocurrir en un circuito alemán, país que con anterioridad le había "robado" sus dos piernas.
A partir de ahí su ambición fue más allá y en el año 2009 quedó cuarto en el maratón de Nueva York. Sus resultados y su empeño le llevaron a competir en los Juegos Paralímpicos de Londres 2012, donde definitivamente se consagró consiguiendo dos medallas de oro en ciclismo y una de plata.
Para cualquier buen guionista este podría haber sido un buen final, pero no lo fue para Zanardi. El italiano dio un nuevo giro a su vida deportiva participando en el Ironman de Hawai y acabándolo en un tiempo de 9h 47´14".
A sus 47 años, Alex Zanardi ya tiene un nuevo reto en mente, pero de momento prefiere guardarlo en secreto. Como él mismo afirma, "simplemente soy un bastardo con suerte".
Imagen | Web Alex Zanardi
