Las abdominales visibles y la gran condición física de Jake Gyllenhaal dan muestra del buen trabajo realizado con entrenamiento y dieta
El físico de Jake Gyllenhaal en el remake de Road House ha incendiado internet. La película que se estrenará el 8 de marzo en el festival South by Southwest y el 21 de marzo en Prime Video ya ha dejado ver un adelanto en tráiler de la increíble condición física del actor al aparecer en diferentes escenas sin camiseta.
Road House, la nueva película en la que Jake Gyllenhaal muestra su increíble condición física
De profesión duro, que es el título en español de Road House es una nueva entrega de la versión de los años 80 que no fue un especial éxito de taquilla, pero sí en formato doméstico, que es lo que se busca en este remake de 2024.
En esta ocasión, Jake Gyllenhaal se pone en la piel de un exluchador de UFC que trabaja como portero en los Cayos de la Florida. En la película le veremos luchar con el mismísimo Conor McGregor, por lo que su preparación física ha sido intensiva.
Dedicación casi obsesiva
En una entrevista para ETOnline el actor de Hollywood explicaba que realizaba dos sesiones de entrenamiento cada día. Por la mañana hacía una sesión de gimnasio con una mezcla de ejercicios denominados como funcionales que le permitieran mejorar su físico a la vez que progresaba en las habilidades de lucha.
El cardio no faltaba en su preparación física, ya que un luchador de UFC necesita contar con un buen fondo cardiovascular para soportar entero toda la pelea. Como ya hizo para otras películas que protagonizó como Southpaw, Gyllenhaal tenía una rutina diaria de varias horas de entrenamiento.
Todo ello le ha hecho lucir en los pesajes de la película como un verdadero luchador de UFC con una gran cantidad de masa muscular y unas visibles abdominales.
Entrenamiento, dieta y hábitos saludables para su mejor forma física
La plataforma Medium hace un repaso al entrenamiento y dieta de Jake, bajo la supervisión de su entrenador Jason Walsh, conocido por ser el entrenador de muchas estrellas de Hollywood. Para ello se basa en el entrenamiento que realizaba para su anterior película de lucha, Southpaw.
En un día normal de gimnasio realizaba entre una y dos horas de boxeo y trabajo cardiovascular. A ello le sumaba una hora de entrenamiento de fuerza, agilidad y mejora de los golpes, y 1.000 abdominales. Lo hacía entre seis y siete días a la semana, lo que demuestra una dedicación absoluta a la mejora física y técnica.
Los ejercicios de fuerza iban desde los clásicos press de banca, sentadilla y demás levantamientos de pesas, hasta ejercicios funcionales de todo tipo, ya sea con peso libre o con el propio peso corporal.
El aspecto cardiovascular lo cubría con la propia lucha, además de carreras de unos 10 - 12 kilómetros, todo ello mezclado con la alta intensidad de los entrenamientos funcionales de fuerza.
Dieta y meditación
El entrenamiento físico no produce resultados notables sin una adecuada dieta y otros hábitos saludables como alejarse del estrés. La dieta de Jack era un equilibrio entre proteínas, carbohidratos y grasas con el número adecuado de calorías para ganar músculo o perder grasa según el objetivo en cada momento.
La meditación ayuda a Gyllenhaal a concentrarse más a la hora de rodar la película y alejar el estrés por los largos días de trabajo. El conjunto de todo lo anterior ha hecho que Jake Gyllenhaal muestre un físico envidiable en Road House: de profesión duro.
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