Los ciclos de vigilia y sueño están estrechamente vinculados a la luz ambiental, debido a que esta última influye en nuestros ritmos circadianos. Un reciente estudio publicado en la revista científica JAMA concluyó que dormir con luz artificial está asociado con una mayor ganancia de peso en el caso de las mujeres.
Menos luz, mejor descanso y menos peso corporal
Como hemos dicho, la luz incide en nuestros ritmos circadianos y éstos determinan nuestros ciclos de sueño y vigilia. Así, si cuando debería estar oscuro para que nuestro sueño sea adecuado tenemos una luz encendida en la habitación o bien, nos hemos dormido frente a la televisión, nuestro descanso será peor.
El reciente estudio evaluó datos de más de 43 mil mujeres que no dormía durante el día, no trabajaban por turnos ni estaban embarazadas, y analizó la exposición a la luz durante el sueño. Los resultados señalan que las mujeres que dormían con luz o televisión tenían un 17% más de probabilidades de haber ganado 5 kilos de peso corporal en el transcurso del estudio (cinco años).
Asimismo, exponerse a la luz artificial mientras se duerme se asoció, independientemente de la calidad del sueño, a mayor incidencia de sobrepeso y obesidad.
Como hemos dicho, esto se debe principalmente a que la luz altera nuestro medio interno, suprimiendo la producción de melatonina que induce sueño y que de noche, ante un ambiente oscuro, se incrementa.
Si bien la luz artificial de noche también puede alterar nuestro descanso y esto, hacernos engordar, el estudio antes mencionado señala que por sí sola la exposición a la luz artificial mientras se duerme se asocia a mayor peso corporal en mujeres.
Imagen | Pixabay
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