Este es el consejo definitivo para evitar que las legumbres produzcan gases

Colocarlas en remojo y cocinarlas a fuego lento por largo tiempo también es de ayuda

Las legumbres son un amplio y variado grupo de alimentos con cualidades  nutricionales valiosas para nuestro cuerpo; es por ello que se recomienda su consumo como parte de una dieta habitual si buscamos cuidar la salud, pero la flatulencia puede ser un efecto secundario frecuente y la razón por la que muchos desestiman su ingesta. Por eso, revelamos el consejo definitivo para evitar que las legumbres produzcan gases.

La razón por la cual las legumbres producen gases

Las legumbres son una excelente fuente de hidratos de carbono complejos para  nuestro organismo y entre ellos se encuentran una gran proporción de  componentes no digeribles o de fibra, que al llegar intactos al intestino son fermentados por las bacterias colónicas.

Dicha fermentación, si bien es muy beneficiosa para nuestro cuerpo y puede  alimentar a la flora intestinal ayudando a fortalecer el sistema inmunitario de nuestro organismo, ocasiona gases que son los que molestan si se presentan en exceso y pueden causar hinchazón abdominal.

La presencia de estos carbohidratos no digeribles y una amplia proporción de fibra en nuestro cuerpo son la razón principal por las cuales las legumbres  pueden producir una gran proporción de gases en nuestro organismo,  especialmente en personas no acostumbradas a su consumo o con problemas  intestinales previos.

Cómo evitar que las legumbres generen gases

Aunque tenemos a nuestra disposición variedad de recursos que podemos utilizar  para minimizar la producción de gases en nuestro cuerpo tras la ingesta  de legumbres, el consejo definitivo e infalible es sin duda incorporar las mismas a la mesa habitual y acostumbrar a nuestro cuerpo a la presencia de estos carbohidratos no digeribles.

Según un estudio publicado en The American Journal of Clinical Nutrition, durante la primer semana de consumir legumbres el 35% de las personas sufren  aumento de los gases intestinales, mientras que esta cifra cayó al 15% en la tercera  semana y al 5% en la quinta semana; lo cual explica porque nuestro cuerpo puede adaptarse perfectamente a la ingesta de legumbres y minimizar la  producción de gases si se familiariza con el consumo de estos alimentos.

Sin duda, el consejo definitivo para evitar que las legumbres produzcan gases es comer legumbres incrementando la cantidad gradualmente y acostumbrarnos a su ingesta y presencia en la mesa habitual.

Otros consejos de ayuda para reducir los gases

Mientras nuestro cuerpo se acostumbra a la ingesta de legumbres también  aconsejamos para minimizar la producción de gases al consumir estos alimentos poner en remojo y enjuagar las legumbres antes de cocinarlas, lo cual ayuda a reducir la cantidad de oligosacáridos no digeribles y a romper la estructura de los mismos para facilitar su digestión.

Cocinarlas adecuadamente hasta que estén tiernas y no retirar al dente de la  cocción es otro consejo válido, así como triturarlas o retirar la piel siempre que sea posible, todo lo cual facilita el procesamiento en nuestro cuerpo y reduce el riesgo de sufrir hinchazón y flatulencia.

Masticar bien y comer despacio también resulta beneficioso de manera tal de  contribuir a la descomposición de los carbohidratos de las legumbres antes de llegar al tracto intestinal.

Estos son algunos consejos y el truco definitivo para que las legumbres dejen de producir gases en nuestro cuerpo, y puedan incluirse como parte de la  mesa habitual ofreciendo únicamente beneficios para la salud del organismo.

En Vitónica | Esto es lo que ocurre en tu cuerpo si comes legumbres cada día

Imagen | Foto de portada: Karolina Grabowska, y foto 1: Denis Liendo ✅

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