Cada vez pasamos más tiempo frente al ordenador. Ya sea por trabajo, por estudios o, simplemente, por placer, muchas de las horas del día las pasamos frente a una pantalla. El problema de esto es que muchas de estas horas las pasamos en una postura inadecuada, a pesar de que nos hayan advertido por activa y por pasiva sobre el dolor y las molestias que esto puede acabar provocándonos.
La realidad es que es hora de que comencemos a tomarnos en serio estas advertencias, ya que una nueva investigación encuentra que las consecuencias pueden ser más serias de lo que creemos. Entre otras cosas, los efectos pueden incluir dolores de cabeza, fatiga, problemas para concentrarnos, tensión muscular e incluso daño en las vertebras a largo plazo.
La causa son algunas de las posturas que ponemos al estar frente a un ordenador. Entre otras cosas, tendemos a acercar la cabeza a la pantalla para verla más de cerca, lo que comprime el cuello, aunque no lo percibamos. Cuando adelantamos la cabeza poniéndola en un ángulo de 45 grados con respecto a los hombros, el cuello trabaja como si fuera una palanca sujetando un objeto pesado - nuestra cabeza - lo que le lleva a soportar un peso más pesado que cuando estamos rectos.
Para llevar a cabo esta investigación contaron con 87 participantes, todos ellos estudiantes universitarios. A estos participantes se les solicitó que se sentaran con el cuello y la cabeza bien alineadas y después que giraran sus cabezas. Posteriormente se les pidió que apretaran el cuello y echaran el cuello hacía adelante para luego volver a girar la cabeza. El 92% de ellos aseguraba poder girar mucho más la cabeza cuando habían mantenido el cuello y la cabeza alineadas.
Posteriormente, contaron con 125 pacientes a los que se les solicitó que apretaran en cuello, como cuando lo adelantamos para ver mejor la pantalla, durante 30 segundos. De estos el 98% aseguró sentir dolor después. Además, 12 de ellos fueron monitorizados con una electromiografía encontrando que en esta postura la tensión del trapecio aumentaba lo que podía llevar a los dolores musculares y los efectos como la fatiga y los dolores de cabeza.
Consejos para colocarnos frente al ordenador
1. Sentarnos correctamente: debemos regular nuestra silla de manera que las rodillas formen un ángulo de 90 grados al poner los pies en el suelo.
2. Utilizar toda la silla: al medir la regulación de la silla debemos tener en cuenta que tenemos que sentarnos en toda la silla, no solo en la punta.
3. La espalda apoyada en el respaldo: lo ideal es mantener la espalda recta apoyada en el respaldo e imaginar que hay un hilo que tira de nuestra cabeza obligándonos a mantenerla alineada recta con el cuello. Si es necesario, debemos forzar esta postura.
4. La pantalla a la altura de los ojos: para evitar tener que acercarnos o hacer movimientos raros con el cuello, lo ideal es que la pantalla esté a la altura de nuestros ojos.
5. Aumentar la fuente de la pantalla: de esta manera nos será más fácil ver la pantalla sin tener que acercar la cabeza hacía ella.
Imágenes | Unsplash
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